Ayer te ví, sueño siniestro, hipocritizacion de una utopía de algún científico, algo loco, poco conocido.

Seguías igual: tus palabras hirientes cual afiladas espinas, tu mirada tajante y resuelta a no mirarme, tus brazos fornidos, que antes se acercaban a mi piel para acariciarla ahora me ceñían un ligero pero concienzudo golpe de puño cerrado en mi hombro izquierdo, masoquistamente pensé: "eso es amor", luego ya solo senti dolor.

Tus sentimientos se desvanecen, creo que van a ir a dar junto con tus palabras(las que alguna vez creí realidad) ¿Donde habrá quedado aquel baúl?  ¿Debajo de que cama? ¿Debajo de que par de labios? Dime ¿Debajo de que piel? ¿POr que callas? ¿Es que acaso no sabes que tu silencio habla? Me hiere, me grita, me reclama, y luego son sutileza, me besa, me agarra, me duerme, me lleva a volar y sin tiempo que perder... me deja caer, me insulta, me reprocha y sin saber yo que, me pregunta: "¿Porque?".

¿Qué quieres de mi si tu ya lo tienes todo?
y yo... yo solo te tenía a ti   ¿Que quieres que haga?
Si viéndote tan cerca desde ya formas parte de mi pasado.

Dejame ser sincera:
Vuela lejos hasta donde tu nombre se borre entre los ecos del olvido.
Amarte es un sueño del que cariñosamente despierto.


Plato de Avellanas.